Es tan importante el encabezado
Cómo crear una ‘línea de asunto’ eficaz
No se le da la importancia que realmente posee, pero la línea del asunto del email es uno de los componentes más importantes para el éxito de nuestras acciones de email marketing.
"Extraido de ... "
Autor:: Raúl Abad TARGETING PEOPLE
De la línea del asunto va a depender nuestra supervivencia en la bandeja de entrada, ya que según sea percibida, hará que la siguiente acción del destinatario sea la de abrir el email, o bien, tirarlo directamente a la papelera sin darnos ninguna otra oportunidad. Aquí, más que nunca se hace patente que la primera impresión es la que cuenta. Mientras dedicamos el máximo de nuestros esfuerzos en crear un contenido de email atractivo e impactante, ¿Cuánto tiempo dedicamos realmente a la línea del asunto? Un estudio reciente indicaba que más del 35% de los receptores abre su email motivados únicamente por la línea del asunto. Esto indica la importancia real que posee este elemento, ya que se trata realmente de la puerta que nos separa de nuestro receptor, y si éste desconfía de quien hay tras ella, nunca la abrirá.
Debemos construir una línea de asunto que sea clara, breve y enérgica, que sea original, personal, impactante y que identifique claramente el contenido del email. Disponemos de unos escasos segundos para darnos a conocer y asegurarnos la apertura de nuestro email.
Seamos muy cuidadosos, pues la línea del asunto viene a ser como el sobre de una carta y es sin duda, la primera impresión que se lleva el destinatario. Por las características y formato propio, lo tenemos más complicado que en el resto del mensaje, porque en la línea del asunto no podemos utilizar imágenes, gráficos, ni resaltados tipográficos como negrita, cursiva, subrayados, etc.
A continuación relaciono los factores que considero más importantes:
La clave para ofrecerle lo que realmente le pueda interesar, está en conocer bien a nuestra audiencia para saber qué es lo realmente relevante para ellos.
Siempre que nuestro sistema nos permita una mayor personalización o segmentación, podremos hacer uso de la información que tenemos para adaptar cada línea de asunto a los intereses de cada suscriptor. El verdadero poder de una comunicación de email eficaz, reside en la habilidad de ‘targetizar’ los mensajes en una verdadera relación uno-a-uno.
Cuando nos sentemos a redactar nuestro mensaje, pongámonos en el lugar de quien vaya a recibirlo. Creemos una imagen de una persona real que se ajuste al perfil de nuestro público objetivo. Pensemos en esa persona, en sus deseos, preocupaciones y de que forma nuestro producto o servicio puede ayudarle a hacer su vida más fácil. De ahí surge un buen mensaje. Nuestra línea de asunto debe ser única y diferente al resto.
Si se trata de una newsletter, podemos colocar al principio el nombre de la newsletter seguido de dos puntos (:) o entre corchetes, dejando el campo ‘De’ para el nombre de la persona o empresa.
Debemos ser muy constantes en este tema para así incrementar nuestra notoriedad y hacer que a nuestro público objetivo le resulte cada vez más familiar nuestro nombre.
Debido al dramático aumento del spam, los receptores cada vez se fijan más en la combinación de las líneas de asunto y del campo ‘De’ para verificar la confianza y procedencia del email.
Cuando se trata de una newsletter, colocar la palabra ‘newsletter’ seguida del número de edición, fecha o volumen, es una pérdida valiosísima de espacio en la línea del asunto. El propio receptor puede ordenar los emails por fechas y en el cuerpo de la propia newsletter podemos incorporar, la fecha, el número de edición o el volumen.
Tampoco es recomendable hacer uso del nivel de importancia marcando una ‘importancia alta’ con el objetivo de resaltar el mensaje en la bandeja de entrada. Se trata de un recurso también muy utilizado por los spammers.
Por otro lado, para conocer qué línea de asunto va a ser la más eficaz para nuestra acción de email marketing, podemos segmentar nuestra lista en varias, para así enviar diferentes líneas de asunto y posteriormente analizar los resultados para comprobar cual es la que realmente ha funcionado mejor y ha tenido mejores índices de open rates, realizando un testeo a tiempo real para maximizar nuestro retorno de inversión.
Recordemos que el objetivo final de la línea del asunto no es otro que el conseguir que la persona a la que nos dirigimos, nos dedique su atención y abra nuestro email. Por ello, deberíamos ser conscientes de la importancia que posee este pequeño elemento dentro de toda la estructura de un email y trabajarlo como realmente se merece.
No se le da la importancia que realmente posee, pero la línea del asunto del email es uno de los componentes más importantes para el éxito de nuestras acciones de email marketing.
"Extraido de ... "
Autor:: Raúl Abad TARGETING PEOPLE
De la línea del asunto va a depender nuestra supervivencia en la bandeja de entrada, ya que según sea percibida, hará que la siguiente acción del destinatario sea la de abrir el email, o bien, tirarlo directamente a la papelera sin darnos ninguna otra oportunidad. Aquí, más que nunca se hace patente que la primera impresión es la que cuenta. Mientras dedicamos el máximo de nuestros esfuerzos en crear un contenido de email atractivo e impactante, ¿Cuánto tiempo dedicamos realmente a la línea del asunto? Un estudio reciente indicaba que más del 35% de los receptores abre su email motivados únicamente por la línea del asunto. Esto indica la importancia real que posee este elemento, ya que se trata realmente de la puerta que nos separa de nuestro receptor, y si éste desconfía de quien hay tras ella, nunca la abrirá.
Debemos construir una línea de asunto que sea clara, breve y enérgica, que sea original, personal, impactante y que identifique claramente el contenido del email. Disponemos de unos escasos segundos para darnos a conocer y asegurarnos la apertura de nuestro email.
Seamos muy cuidadosos, pues la línea del asunto viene a ser como el sobre de una carta y es sin duda, la primera impresión que se lleva el destinatario. Por las características y formato propio, lo tenemos más complicado que en el resto del mensaje, porque en la línea del asunto no podemos utilizar imágenes, gráficos, ni resaltados tipográficos como negrita, cursiva, subrayados, etc.
A continuación relaciono los factores que considero más importantes:
- Definir los objetivos
- Destacar los beneficios
La clave para ofrecerle lo que realmente le pueda interesar, está en conocer bien a nuestra audiencia para saber qué es lo realmente relevante para ellos.
- Personalizar y segmentar
Siempre que nuestro sistema nos permita una mayor personalización o segmentación, podremos hacer uso de la información que tenemos para adaptar cada línea de asunto a los intereses de cada suscriptor. El verdadero poder de una comunicación de email eficaz, reside en la habilidad de ‘targetizar’ los mensajes en una verdadera relación uno-a-uno.
- Individualizar
Cuando nos sentemos a redactar nuestro mensaje, pongámonos en el lugar de quien vaya a recibirlo. Creemos una imagen de una persona real que se ajuste al perfil de nuestro público objetivo. Pensemos en esa persona, en sus deseos, preocupaciones y de que forma nuestro producto o servicio puede ayudarle a hacer su vida más fácil. De ahí surge un buen mensaje. Nuestra línea de asunto debe ser única y diferente al resto.
- Crear expectación
- Crear nuestro propio estilo
- Branding
Si se trata de una newsletter, podemos colocar al principio el nombre de la newsletter seguido de dos puntos (:) o entre corchetes, dejando el campo ‘De’ para el nombre de la persona o empresa.
Debemos ser muy constantes en este tema para así incrementar nuestra notoriedad y hacer que a nuestro público objetivo le resulte cada vez más familiar nuestro nombre.
- Relacionar directamente con el campo ‘De’
Debido al dramático aumento del spam, los receptores cada vez se fijan más en la combinación de las líneas de asunto y del campo ‘De’ para verificar la confianza y procedencia del email.
- Optimizar
Cuando se trata de una newsletter, colocar la palabra ‘newsletter’ seguida del número de edición, fecha o volumen, es una pérdida valiosísima de espacio en la línea del asunto. El propio receptor puede ordenar los emails por fechas y en el cuerpo de la propia newsletter podemos incorporar, la fecha, el número de edición o el volumen.
- Abreviar
- Cuidado con algunas palabras
- No usar mayúsculas
- No utilizar signos
Tampoco es recomendable hacer uso del nivel de importancia marcando una ‘importancia alta’ con el objetivo de resaltar el mensaje en la bandeja de entrada. Se trata de un recurso también muy utilizado por los spammers.
- Fijémonos en los demás
- No a las prisas
- Probar, probar y probar
Por otro lado, para conocer qué línea de asunto va a ser la más eficaz para nuestra acción de email marketing, podemos segmentar nuestra lista en varias, para así enviar diferentes líneas de asunto y posteriormente analizar los resultados para comprobar cual es la que realmente ha funcionado mejor y ha tenido mejores índices de open rates, realizando un testeo a tiempo real para maximizar nuestro retorno de inversión.
Recordemos que el objetivo final de la línea del asunto no es otro que el conseguir que la persona a la que nos dirigimos, nos dedique su atención y abra nuestro email. Por ello, deberíamos ser conscientes de la importancia que posee este pequeño elemento dentro de toda la estructura de un email y trabajarlo como realmente se merece.